Danna del Valle

​Para abrir las puertas del placer, los besos y las caricias son esenciales. Estos dos elementos permiten que la relación entre los dos amantes sea más intensa y según como se lleven a cabo, a través de ellas, podemos crear el escenario ideal para tener un encuentro sexual pleno (y delicioso ).

Siempre se ha pensado que los hombres se sienten más atraídos por el sexo que por los besos y las caricias pero solo se trata de un falso mito. ¿A qué hombre no le gusta sentir los suaves pero atrevidos besos de su compañera?¿O experimentar las cálidas pero firmes caricias de su amante? Estos son los momentos más excitantes: la temperatura aumenta y el ambiente empieza a calentarse… (ejem! )

Se pueden dar en toda la extensión del cuerpo y de mil formas (moderados, apretados, suaves…). Esto lo convierte en un apasionado juego erótico cuyo objetivo es ofrecer el máximo placer y la recompensa es recibir el máximo placer.

En lo personal, entre más se prolonga el juego, el deseo se me torna más intenso (mi imaginación vuela y crea pensamientos morbosos ) y ansío que mi compañero me embista mientras sus manos recorren aquellas partes de mi cuerpo que estén a su alcance. Esos instantes, no puedo describirlo con palabras, simplemente lo vivo, lo siento. Es recordarlo y se me eriza la piel…


Danna.

Más en: https://dannadelvalle.wordpress.com/