El Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional ha condenado hoy a dos mujeres a 21 meses de cárcel y a una indemnización de 15.000 euros por estafar a centenares de jóvenes con la promesa de darles trabajo como GOGOLO, han informado fuentes jurídicas.
Las dos mujeres se han conformado con esta pena tras llegar a un acuerdo con el fiscal que pedía para ellas tres años de cárcel y el pago de 15.000 euros en concepto de responsabilidad civil, por lo que el juez Central de lo Penal, José María Vázquez Honrrubia, dictará en los próximos días la sentencia con la condena acordada.
La estafa se gestó en 2003 cuando las dos mujeres -María Concepción P.B. y Ángela L.S.- insertaron anuncios en varios medios locales y provinciales de toda España con el reclamo:"necesitamos personal masculino de todas las edades. Trabajar urgentemente" o "se necesita personal urgente para trabajar".
Interesados en el anuncio, los jóvenes, la mayoría en paro o inmigrantes ilegales, llamaban al teléfono 902 que se indicaba y una mujer que se hacía llamar "Miranda" les explicaba que el trabajo consistía en "realizar labores de compañía a determinadas clientas".
Pero antes, debían pagar una determinada cantidad de dinero en una cuenta bancaria, abierta en una sucursal de Torremolinos (Málaga) a nombre de una empresa denominada CONANG S.L.
Las cantidades solicitadas con la promesa de obtener altos beneficios variaban de los 189 a los 600 euros, dinero que depositaron un centenar de jóvenes por medio de trasferencia bancaria.
Cuando pasado un tiempo seguían sin recibir noticias, los jóvenes llamaban para preguntar cuándo iban a contactar con ellos para prestar sus servicios, y "Miranda" primero les daba excusas y después evitaba ponerse al teléfono.
Al verse víctimas de una estafa, algunos jóvenes decidieron denunciarlo, pero la mayoría no lo hizo por vergüenza o por encontrarse en situación irregular en España.
Debido a ello y a que en muchas de las transferencias no constan nombres, sólo se ha podido determinar que la cantidad estafada a los perjudicados que optaron por acudir a la vía judicial fue de 15.000 euros, aunque la investigación policial ha determinado que las dos mujeres pudieron llegar a amasar más de 149.000 euros.
Las cantidades exigidas a los jóvenes no eran, no obstante, excesivamente altas para no generar desconfianza en las potenciales víctimas y porque así la infracción, de forma individual, podía tener un carácter penal inferior.
La identidad de las estafadoras quedó al descubierto con el cotejo de la cuenta bancaria de Torremolinos en la que ambas aparecían como beneficiarias.
http://www.adn.es/lavida/20110308/NWS-1398-Condenadas-prometiendoles-trabajo-jovenes-estafar.html
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Madre mía, mira que hay que ser... hay que ser...Pero antes, debían pagar una determinada cantidad de dinero en una cuenta bancaria, abierta en una sucursal de Torremolinos (Málaga) a nombre de una empresa denominada CONANG S.L.
Las cantidades solicitadas con la promesa de obtener altos beneficios variaban de los 189 a los 600 euros, dinero que depositaron un centenar de jóvenes por medio de trasferencia bancaria.
Cuando pasado un tiempo seguían sin recibir noticias, los jóvenes llamaban para preguntar cuándo iban a contactar con ellos para prestar sus servicios, y "Miranda" primero les daba excusas y después evitaba ponerse al teléfono.
Y no lo digo por ellas sino por los pánfilos que picaron.
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