En cierta forma, creo que tanto Eros como Melancolía representan lo mismo: el tiempo implacable, la diferencia entre existir y vivir.
Por otro lado, aunque no he visto la película que citas, me sorprende que Lars von Trier escoja a Wagner, es ciertamente previsible asociar sus acordes epicos a la llegada del fin del mundo.
(se ha ido el iconico de dar las gracias y no aparece)
Marcadores